jueves, 29 de agosto de 2019

Lidera desde tus talentos y habilidades

¿Hasta qué punto conoces tus talentos y habilidades?
Uno de los pilares fundamentales que contemplo es el desarrollo consciente de habilidades (personales y profesionales) en las que no hemos sido educad@s a lo largo de nuestra etapa formativa.

Dentro del mundo empresarial y organizacional es cada vez más frecuente escuchar conceptos tales como potencial, liderazgo, desarrollo, evolución e incluso felicidad.  Y es que cada vez son más las empresas y organizaciones que comprenden la relación existente entre la satisfacción personal de quienes las componen,la satisfacción general de la organización en su conjunto (clima de felicidad) y los resultados en términos económicos y de productividad.
Por ello, el entrenamiento en habilidades soft de forma consciente, el desarrollo de competencias emocionales, la comunicación empática y asertiva, la atención al momento presente (Mindfulness), la proactividad, la implicación y actitud colaborativa, el pensamiento creativo en el trabajo o el sentimiento de equipo y unidad generan un impacto positivo y un desarrollo tanto a nivel personal como colectivo dentro de la organización que la lleva a alcanzar y materializar esos objetivos y resultados fijados.
Hablamos de liderar, de liderar nuestra vida y liderar en nuestra profesión o nuestro trabajo. Hablamos de salvar esos obstáculos que la vida nos pone delante. De bordearlos, sortearlos, escalarlos o incluso derribarlos. Y todo ello teniendo en cuenta que la implicación emocional cuenta. Y mucho.

¡Qué diferentes son los resultados de la resolución de un problema cuando te sientes fuerte! Pero fuerte de verdad. Y cómo cuesta (¡cómo cuesta!) ser creativ@, productiv@, comunicarse con claridad, planificarse eficazmente, cerrar ventas o alcanzar los objetivos  cuando tenemos una herida, un golpe emocional. Cuando el área herida es el área emocional. ¿Te suena verdad? A tod@s nos ha pasado. A tod@s nos pasa.

Sin embargo, y pese al dolor, la vida sigue y no se detiene por mucho que sangremos. Entonces, si eres líder de tu empresa, responsable de tu equipo… ¿¿qué haces?? Y mejor aún, ¡¡¿cómo lo haces?!! Tu empresa tiene que seguir, por mucho que tú estés herid@. Tu estado convaleciente no puede interferir en los resultados de tu negocio. La vida de tu empresa, de tu proyecto debe seguir. Tu gente, tu equipo debe continuar motivado. No puedes arrastrarlos … Así pues mi pregunta es previsible: ¿Cómo vas a hacerlo?
Tanto si eres responsable de un equipo, como si eres tú el responsable/la responsable de tus resultados, hablamos de lo mismo. Hablamos de ser directores conscientes y coherentes. Hablamos del carácter. Hablamos de hábitos.
Siembra un pensamiento y tendrás una acción,
siembra una acción y cosecharás un hábito,
siembra un hábito y cosecharás un carácter,
siembra un carácter y cosecharás un destino.
Dice un refrán (inglés) que primero hacemos nuestros hábitos y luego nuestros hábitos nos hacen a nosotros.
Y especialmente en los momentos de caída, de vulnerabilidad, es cuando más necesitamos recurrir a esos hábitos que nos llevan a la excelencia.
Y siempre podemos elegir qué hábitos son los que van a regir nuestra vida, los que queremos y decidimos que vamos a consolidar.
Puesto que estamos en el mes por excelencia (junto con enero) de empezar, te propongo que revises tus hábitos y recuerdes que el hábito te hace. Y te deshace …
Es en esos momentos de dificultad cuando la vida te examina, es entonces cuando puedes sacar nota. Es entonces cuando puedes comprobar qué hábitos son los que tienes integrados y te llevan directo hacia la excelencia.
Este es un excelente momento para revisar tus hábitos ¡Adelante!

Tus innegociables

¿Corres detrás de la felicidad? ¿Parece que la rozas pero se te escapa? Todas las personas tenemos unos mínimos innegociables que nos hacen ...